lunes, 20 de diciembre de 2010

Oskar Sala. Die vergangene Zukunft des Klanges

La historia de Oskar Sala y el trautonium
Cartel del documental biográfico sobre Oskar Sala.
En los últimos años, y sobre todo con la aparición del formato DVD, los "audionautas" que buscamos conocer más detalles sobre la historia de la música electrónica, hemos visto satisfechas nuestras expectativas. Leon Theremin, Robert Moog, Bruce Haack, Jean Jacques PerreyRaymond Scott o Erkki Kurenniemi son sólo algunos de los pioneros que cuentan con documentales dedicados a glosar su vida, su obra y su legado.

En esa ilustre lista faltan personalidades de la talla de Pierre Schaeffer o Karlheinz Stockhausen que todavía no tienen un film a la altura de su trascendencia histórica dentro de la música del siglo XX. Con otros en cambio, como es el caso de Oskar Sala que hoy nos ocupa, sí existe un documental, pero desgraciadamente no ha podido ser editado todavía y su exhibición sólo se ha hecho por medio de festivales de cine o ciclos dedicados a la figura del artista.

Ante esta situación, hace alrededor de un año me puse en contacto vía email con la productora alemana Upstart! para ver si existía alguna posibilidad de adquirir el documental Oskar Sala. Die vergangene Zukunft des Klanges, dirigido en el año 2000 por Oliver Rauch e Ingo Rudloff. Desde la productora a su vez remitieron mi correo electrónico a Oliver Rauch, que muy amablemente me contestó y me habló entre otras cosas de lo inspiradora que era la figura y la obra de Sala, y que él y Rudloff, el co-director, llevaban batallando casi diez años para que se editara el documental en DVD, pero que diversos problemas de índole legal con las licencias de la película, les habían impedido conseguir su objetivo.

Rudloff y Rauch autores del documental biográfico sobre Oskar Sala
Oliver Rauch (izq.), e Ingo Rudloff (dcha.), los autores del documental
Oskar Sala.
Die vergangene Zukunft des Klanges.

Casualidades de la vida, hace unos meses y de un modo totalmente fortuito buscando información en internet sobre Oskar Sala para otra entrada de este blog, dí con una página web sobre cine documental desde la que se podía descargar Oskar Sala. Die vergangene Zukunft des Klanges subtitulado en inglés. 

El documental, de 83 minutos de duración, que se podría traducir como Oskar Sala. El pasado (o anterior) futuro del sonido, no sigue un orden cronológico estricto, sino que durante su metraje tienen lugar varios saltos adelante y atrás en el tiempo. Asimismo, cabe recordar que este documental sirvió también como conmemoración del 90 aniversario del artista en el año 2000.

La película trata diferentes momentos de la trayectoria musical del compositor e inventor alemán, desde sus primeros años de vida en su Greiz natal, su llegada a Berlín para estudiar piano y composición con Paul Hindemith y su posterior implicación en el Trautonium, hasta algunos de sus últimos proyectos.

Como tarjeta de presentación Die vergangene Zukunft des Klanges se abre con imágenes de Oskar Sala interpretando el Mixturtrautonium y hablando sobre la banda sonora de The Birds (Alfred Hitchcock, 1963), en el programa "Der große Preis" de la cadena alemana ZDF en 1980.

La invitación que recibe Oskar Sala para acudir a un local de vanguardia en el que las nuevas generaciones se recrean con la música de Sala y las imágenes de Manfred Durniok para la película Unter der Oberfläche (1960), que retrata en cámara lenta el ambiente de los clubs nocturnos de entonces, sirven para impulsar el relato. Con este director, Sala llevó a cabo una estrecha colaboración desde los años 60 totalizando más de cuarenta películas de todos los géneros y estilos, de las cuales al menos quince fueron films sin diálogos, sólo con imágenes y música.

Imagen del documental Die vergangene Zukunft des Klanges sobre Oskar Sala
Oskar Sala en una imagen del documental.
Un ejemplo de este tipo de cine experimental fue la película suiza A Fleur d'Eau (Alexander Seiler y Rob Gnant, 1962), que obtuvo la Palma de Oro en el Festival de Cannes al mejor cortometraje y en donde el Mixturtrautonium crea símiles sonoros de diferentes escenas acuáticas, lo que Sala denomina "música evocativa". A lo largo del documental veremos otros ejemplos de la música de Oskar Sala en conjunción con la imagen en la película comercial Der Fächer para la compañía BASF, y el premiado film industrial Stahl, Thema mit Variationen (Hugo Niebeling, 1960), que se intercalan en distintos momentos del metraje.

Las aportaciones del compositor Harald Genzmer y las del propio Oskar Sala son las que recrean la trayectoria artística del músico alemán desde sus primeros años hasta la Segunda Guerra Mundial. A través de las palabras de Genzmer se rememora su etapa junto a Sala como estudiantes de Hindemith en Berlín. Gracias a éste, y viendo el interés manifiesto de Sala por el Trautonium tras asistir a las primeras demostraciones, fue aceptado en el círculo de colaboradores de Friedrich Trautwein. Dos puntos interesantes de este segmento son por un lado la grabación de 1930 en la que Sala interpreta el primer modelo del Trautonium ante las cámaras, y también la información sobre el primer concierto eléctrico con éste que tuvo lugar el 20 de junio de 1930 en Berlín con Sala, Hindemith y Rudolf Schmidt como intérpretes.

En 1930 Oskar Sala participó en una de las primeras películas sonoras del cine alemán, Stürme über dem Montblanc dirigida por Arnold Fanck, para la que el músico explica cómo logró con el Trautonium el sonido del motor de un aeroplano que sobrevuela las cumbres nevadas de los Alpes.

La llegada del Partido Nazi al poder en 1933, la prohibición impuesta contra el llamado Entartete Kunst o "arte degenerado" alcanzó también a nuestro protagonista en la Berliner Musikhochschule, donde hubo presiones para que Trautwein, Sala y otros colaboradores abandonaran las investigaciones y desarrollos musicales con el Trautonium. No obstante, ante esta situación, Trautwein a través de un contacto consiguió una audiencia con el Ministro de Propaganda del Reich Joseph Goebbels, en la que Oskar Sala interpretó piezas de Genzmer, Hindemith y diferentes efectos que entonces sorprendían al público, como el famoso 'glissando' o líneas de bajo. Tras la representación el mandatario les dejó continuar con su trabajo. Genzmer relata cómo Sala y él continuaron interpretando su Concierto para Trautonium y Orquesta con la Filarmónica de Berlín, incluso ya bien entrada la Segunda Guerra Mundial, hasta 1942. Con la llamada a filas de ambos músicos en la fase final del conflicto armado concluyó la primera etapa de desarrollo del Trautonium.

Tras la guerra, Sala continuó desarrollando el Trautonium hasta convertirlo en el  perfeccionado Mixturtrautonium de 1952, instrumento con el que continuó ofreciendo conciertos durante los años 50, para ir orientándose paulatinamente desde finales de esa década hacia el campo de las bandas sonoras.

En ese terreno, uno de los momentos más grotescos del documental sin duda se encuentra en las imágenes de la película de 1957 Anders als du und ich del director Veit Harlan. Una película que en principio debía ser un alegato contra el artículo 175 del código penal alemán que condenaba la homosexualidad, terminó convirtiéndose tras la censura, el añadido de nuevos diálogos y el re-rodaje de algunas escenas en una soflama fascista en favor de la homofobia. Transcribo literalmente de Wikipedia el delirante argumento del largometraje: "Los padres del estudiante de secundaria de 17 años Klaus Teichmann se preocupan por su hijo: cada vez más a menudo, el hijo se relaciona con homosexuales. El Sr. Teichmann denuncia al principal responsable, el anticuario Dr. Boris Winkler. El Dr. Winkler es un vanguardista local que da a conocer entre la juventud la música electrónica y el arte moderno. Debido a que no existen pruebas y que no se le puede demostrar comportamientos deshonestos, la denuncia es archivada. La Sra. Teichmann intenta volver a su hijo a la buena senda con una chacha bonita, Gerda. Gerda consigue efectivamente seducir a Klaus. Un conocido que ha observado la escena, lo cuenta todo al Dr. Winkler. Ahora, Winkler denuncia a la madre por alcahuetería y el juez, a pesar de comprender las razones de la madre, la tiene que condenar a la cárcel. Pero, al hijo, a partir de ese momento, sólo le gustan las mujeres, se aleja de la música electrónica moderna y sólo escucha Chopin".

Visita de Alfred Hitchcock al estudio de Oskar Sala en diciembre de 1961
Remi Gassmann, Alfred Hitchcock y Oskar Sala
en el estudio de éste último en diciembre de 1961.
En 1961 Remi Gassmann, compositor estadounidense y antiguo compañero de estudios de Genzmer y Sala en Berlín, fue la persona que le recomendó a Alfred Hitchcock para el siguiente proyecto cinematográfico del director británico. Para The Birds (Los pájaros, 1963), como así se llamó la película, Hitchcock necesitaba unos graznidos aterradores para lograr el efecto deseado. Oskar Sala relata cómo Hitchcock visitó Berlín y estuvo en su estudio escuchando los sonidos que el músico había creado para la escena en la que el personaje de Melanie Daniels (encarnado por la actriz Tippi Hedren), se encuentra sitiada en el piso superior de su casa por los pájaros, que han ocupado el tejado y súbitamente comienzan su ataque.

El gran éxito de la película le proporcionó a Sala cierta fama en su país de origen que a su vez le reportó un importante volumen de encargos para proyectos en el mundo del cine y la televisión.

Las declaraciones del profesor Hans-Jörg Borowicz, director del proyecto del Mixturtrautonium transistorizado de la Fachhochschule der Deutschen Bundespost Berlin para Oskar Sala, suponen una de las únicas conexiones directas con la vertiente técnica del Trautonium. La conversación que éste mantiene con Sala se intercala muy acertadamente con imágenes del documental de 17 minutos de duración, Portrait du Compositeur Oskar Sala, filmado en 1966 por los directores suizos Alexander Seiler y Rob Gnant, y que gracias a la contraposición de imágenes entre ambos podemos apreciar algunas de las diferencias entre los dos prototipos de Mixturtrautonium, el de válvulas de 1952 y el de transistores de 1988.

La vertiente técnica del Trautonium continúa de la mano de Hanno Rinne di Rosa, que junto a Jürgen Hiller y Wolfgang Müller, son algunas de las personas que han contribuido a la revitalización del legado de Sala, así como al desarrollo de nuevas versiones del Trautonium, siguiendo los planos originales del profesor Borowicz, aunque sus versiones son bastante más rudimentarias que las del músico de Greiz.

En la parte final del documental, además de varias escenas de Sala interpretando el Mixturtrautonium en su estudio, también se incluyen algunos de los eventos más importantes que estaba llevando a cabo el músico por entonces.

La película Das Boot 2: La última misión producida por Manfred Durniok con música de Oskar Sala
El film bélico para televisión Das Letzte U-Boot
de Frank Beyer, con música de Oskar Sala.
En los años 90 Sala volvió a colaborar con Manfred Durniok. Por un lado realizó la banda sonora de Das Letzte U-Boot (Das Boot 2: La Última Misión, Frank Beyer, 1993), producida por Durniok, que sería uno de los últimos trabajos importantes de Oskar Sala para la televisión. Por otro lado trabajó mano a mano con el director y productor en Teufelsberg (1994), una película sin diálogos ambientada con música de Mixturtrautonium sobre una antigua estación de espionaje abandonada de la época de la Guerra Fría. Sala recrea musicalmente diferentes panorámicas exteriores e interiores del recinto, repleto de salas vacías, cables cortados, paredes y techos desmantelados o ventanas tapiadas. Desgraciadamente ninguna productora estuvo interesada en este film.

Uno de los hechos más interesantes en la última etapa de la carrera de Oskar Sala, fue el efecto inspirador que tuvo en las nuevas generaciones de músicos electrónicos. Ya en su época el Mixturtrautonium cautivó a músicos como Christopher Franke de Tangerine Dream o a Florian Schneider de Kraftwerk. El hechizo continuó en los años 90 con artistas como Pete Namlook o Thomas Köner, y que ponían de manifiesto el interés y la curiosidad infinita de un experimentador como Sala.
 
En Die vergangene Zukunft des Klanges podemos apreciar ese interés en el fallido concierto junto a Thomas Köner y Max Eastley en el Volksbühne berlinés en abril de 1997, en el que el Mixturtrautonium no funcionó correctamente y Sala no pudo tomar parte en el mismo, convirtiéndose a la postre en su última presentación pública con el instrumento.

Al año siguiente, en 1998, la música de Sala se escuchó en la representación teatral Der Sturm (una versión actualizada de La Tempestad de William Shakespeare). Su director Stephan Suschke, afirma al respecto de la música de Oskar Sala que "lo que la distingue de la música de sintetizador convencional es que no es 'bonita', la división entre entretenimiento y música seria desaparece completamente (...) debido a los tonos subarmónicos que utiliza, su sonido nunca se convierte en kitsch o demasiado 'bonito'. La música posee increíble calidad".

Por último varios de los participantes en el documental extraen sus conclusiones al respecto del futuro del Mixturtrautonium. El más optimista es Hanno Rinne que considera que el Trautonium sobrevivirá, sin embargo otros como Stephan Suschke o Ulrich Rützel (presidente del sello Erdenklang), en cambio son más pesimistas y consideran que cuando Sala desaparezca se producirá un caso único en la historia de la música, en el que la muerte de un intérprete conlleve a su vez la extinción del instrumento.

El documental concluye en el mismo bar de vanguardia del inicio con Oskar Sala enfrentado a la utilización moderna de su música mediante bucles de imágenes y sonidos manipulados por un VJ que le explica a Sala su técnica. Es curioso constatar como a pesar del gran interés que manifiesta, esa reconstrucción actualizada de su música no termina de convencer al nonagenario compositor. 

En Oskar Sala. Die vergangene Zukunft des Klanges vemos a un Oskar Sala que con 90 años todavía conserva esa chispa en la mirada, esa lucidez, esa ilusión por conocer nuevas formas musicales y por continuar su labor casi obsesiva con el Mixturtrautonium. Precisamente una de las cosas que pone de relieve el documental es el celo con el que Sala atesoró para sí mismo todo su conocimiento sobre el Trautonium. Hacia el final de su vida, Sala se encontraba en una situación insólita, había dedicado por completo 70 años de su existencia al perfeccionamiento técnico e interpretativo de un instrumento único, para el que jamás tuvo tiempo ni interés en instruir a eventuales discípulos. Echando la vista atrás, Sala sólo podía resignarse con cierta amargura ante este hecho. 

Die vergangene Zukunft des Klanges es un documental que se sustenta exclusivamente en la trayectoria artística de Oskar Sala con pequeñas y poco relevantes omisiones, sin embargo la historia del Trautonium es más superficial: no se menciona nada de los diferentes modelos que existieron, el hecho de su fabricación en serie, ni de cómo genera el sonido subarmónico. Esa parte, tediosa para el gran público, se suple sin embargo con abundantes fragmentos del músico tocando el Mixturtrautonium en su estudio berlinés. Otro punto controvertido por el que los autores pasan de puntillas, es el papel que tuvo el Trautonium durante el Tercer Reich y las facilidades que Trautwein y Sala obtuvieron del régimen nazi para desarrollar su trabajo. 

Este documental es ciertamente un deleite para todos los aficionados a los sintetizadores y a la historia del sonido electrónico, aunque quizá no alcanza el nivel emocional de la obra de Steve M. Martin sobre Lev Termen (Theremin: An Electronic Odyssey, 1994), pero aun así brilla a gran altura. Esto se debe en parte a la azarosa (casi de película), vida de Termen en comparación con la menos 'glamourosa' de Sala, y al hecho de que el documental de Martin se recrea más en asuntos de la vida privada del inventor, mientras que el de Rauch y Rudloff se centra exclusivamente en la obra y la dedicación de Oskar Sala al Trautonium

Oskar Sala. Die vergangene Zukunft des Klanges es un excelente retrato histórico y un complemento indispensable para los últimos discos compactos editados en vida por el músico alemán como My Fascinating Instrument (Erdenklang, 1990), o Subharmonische Mixturen (Erdenklang, 1997), así como al fantástico libro fotográfico Oskar Sala. Pionier der elektronische musik (Satzwerk, 2000), de Peter Badge

Sólo queda esperar que algún día se solucionen los problemas legales que impiden una edición oficial de Oskar Sala. Die vergangene Zukunft des Klanges, para que podamos disfrutar todos de la obra de otro de los grandes protagonistas de la historia de la música electrónica.

2 comentarios:

  1. Gracias por tu fantástico trabajo en este blog. Pero ¿porqué no nos cuentas cómo encontrar el link del documental de Oskar Sala en cuestión? Me estoy volviendo mico buscándolo. Gracias.

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  2. Hola. Este documental se ha intentado subir varias veces a Youtube, yo mismo hice un intento y me lo borraron a las pocas horas. Hace tiempo que no lo compruebo, pero quizá con eMule lo encuentres, creo que ahí lo localicé yo hace años. No he visto ningún otro sitio en el que esté disponible.

    Un saludo

    Pablo/Audionaut

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